viernes, 13 de enero de 2012

Un paso V

Perdonadme por haber tardado tanto, pero entre fiestas y exámenes no he tenido apenas tiempo. 



V.Podría ser el…

Al día siguiente le tocaba a Cara ir a su casa por lo que Camille limpió y acondicionó su cuarto lo mejor que pudo, cambió el edredón por uno nuevo de color verde, quitó el polvo a las estanterías y ordenó sus libros. Cuando terminó la jovencita rubia no podía explicarse por qué se estaba tomando tantas molestias por una chica a la que casi ni conocía. Pero ya no tuvo mucho más tiempo para pensar porque pronto llegó la morena. Cara observó a su anfitriona, llevaba un sencillo vestido blanco y su cabello parecía normal, algo que le favorecía enormemente. Frunció el ceño, ¿aquello que acababa de pensar era una alabanza hacia Camille Staunton? Absurdo, sin duda.
Al ver la habitación no pudo contener su lengua, algo que supo que lamentaría –No es tan rosa como imaginaba- Entonces Camille se volvió como una exhalación -¡Tu cuarto tampoco era el agujero negro que me había dado pesadillas!- Aquel comentario le enfadó mucho -No se puede juzgar a alguien antes de conocerle- dijo Cara con una mirada seria. –Entonces aplícate el cuento- respondió Camille marchándose con paso arrogante. Cara trató de responder pero se quedó moviendo la boca como un pez fuera del agua, por primera vez en su vida Cara Rice no sabía qué decir. Cuando la observó abandonar la habitación, la joven morena se dedicó a buscarla, pero al no hallar a nadie, se marchó sin aclarar sus pensamientos. Tras un rato Camille regresó a su cuarto y al verlo vacío se tumbó sobre la cama abrazando la almohada, no sabía por qué pero aquella discusión le había dejado un regusto amargo.